Acariciada

Lo importante no es lo que sentimos, sino lo que pensamos acerca de estos sentimientos y lo que hacemos con estos ello.

Puede que en la historia de cada uno de nosotros haya algunas heridas, quizás muchas.

Y lo valioso es transformar cada herida en un recordatorio que nos impulse a agradecer quien somos en cada momento.

Es por eso que mis heridas muchas veces son sustento e inspiración para mis creaciones y se convierten en espacios donde caminar, lugares donde sentarse a contemplar nuestra propia respiración.

Esta obra simboliza una invitación para observar la realidad que nos rodea y el hecho de que ahora mismo estamos vivos.