Corazonada

A veces las cosas suceden con la fuerza de una explosión, a veces las emociones irrumpen en nuestro ser con mucha fuerza, hay cosas que nos hacen impresionarnos, hay cosas que no se nos olvidan y forman parte de nuestra memoria.

Tengo la suerte de poder estar en mi taller y transformar esas cosas que no se pueden ver en cosas que se pueden mirar, contemplar y disfrutar. Incluso a veces son cosas de una gran belleza aunque nacieran de emociones inexplicablemente intensas.

A veces se olvidan las emociones que provocaron esa transformación de pincel y materia y queda sólo la belleza de un color, la sutileza de una mancha, la fuerza de un movimiento o el detalle de una línea… y eso es lo que más me reconforta.